............

............

jueves, 11 de febrero de 2010

Sé infiel y no mires con quién

Entre las numerosas amenazas que pueden planear sobre una relación de pareja, la infidelidad es quizá la más temida. Salvo excepciones, una pareja estable se construye sobre un compromiso –tácito o expreso- de exclusividad mutua en cuanto a las relaciones sexuales.
Sin embargo, la ruptura de ese compromiso no es infrecuente. Numerosos factores –desde una personalidad emocionalmente inestable hasta el despecho por una discusión violenta- pueden conducir a un encuentro sexual con una persona diferente de la pareja “oficial”.
La cuestión estriba en saber si una infidelidad tiene que traducirse en una ruptura de la pareja, o si puede suponer simplemente un tropiezo desagradable.
¿Se puede perdonar –pero de verdad- una infidelidad? ¿Supone la pérdida definitiva de la confianza? ¿Indica que el amor y la ilusión se han roto para siempre? ¿Acaso es la exclusividad sexual un imperativo cultural antinatural?

8 comentarios:

  1. Este tema da mucho de si, y más con tantas preguntas...
    Empezando por el final:
    Si que pienso que se trata de un imperativo cultural antinatural, pero únicamente después de que las crías se han convertido en adultos, hasta entonces se necesita de una estabilidad y demás que se obtiene mejor si ambos padres están centrados en lo que tienen que estar.

    No creo que la ilusión y el amor se rompan para siempre, indica que algo no se está haciendo bien, o que simplemente esa relación no llena suficientemente a los dos. En el primer caso se puede buscar el origen de los errores e intentar arreglarlos, y en el segundo, puede que lo mejor sea dejar de intentar que funcione, pero no es que se haya estropeado por la infidelidad, simplemente la relación no era sana, y esa ha sido una consecuencia, un síntoma.

    Lo de la pérdida definitiva de la confianza depende mucho de cada uno, yo personalmente no creo que no se pueda recuperar la confianza, pero hay que curar la herida, y eso lleva tiempo, necesita de muchas muestras de confianza, y sobre todo uno tiene que sentir que puede volver a confiar (luego uno puede equivocarse o no).

    Por todo esto, yo creo que si se puede "perdonar" de verdad una infidelidad, entendiendo perdonar como "eximir del castigo merecido".

    De todas formas existe una teoría del 100%, que básicamente dice que si uno es feliz con su pareja al 100% no necesita buscar nada fuera, así que lo importante es conseguir mantenerse por ahí arriba, y hacer que la otra parte se sienta igual.

    ResponderEliminar
  2. Bien, pero...
    ¿Realmente se puede obtener ese 100%?
    ¿No será más real afirmar que si uno tiene el 90 o el 95% ya podría darse con un canto enlos dientes?

    ResponderEliminar
  3. Bueno, a mí no me gusta darme golpes en los dientes, y además no soy yo quien crea las teorías, pero el 100% es difícil conseguirlo en todo, yo no digo que tu pareja sea compatible al 100% ni que lo haga todo bien, es sólo que tú sepas sentirte al 100% con el 80% de perfección que es tu pareja, lo importante es cómo de satisfecho te sientes tú.

    ResponderEliminar
  4. La infidelidad implica una traición y, por tanto, la pérdida de la confianza. Se puede vivir y compartir la vida con alguien en quien ya no confías? Yo no podría. Por supuesto q es imposible obtener ese 100% (creo q no existe nada en la vida con qué tenerlo) pero en una relación de pareja hay fallos y fallos. Algunos son asumibles, otros imperdonables. Claro q todo depende de la personal escala de valores de cada cual, lo q para uno es terrible para otro puede ser casi banal. Ayer estuve en una conferencia de Enrique Rojas, interesantísima, y nos decía q lo importante no es la realidad, sino nuestra apreciación de la realidad. Si detrás de esa infidelidad uno quiere ver la enajenación de una borrachera, simplemente, esos cuernos no pasarán de una anécdota. Pero si lo q vemos es el hastío q te lleva al alcohol y lo q venga en culquier cama, es relación está totalmente perdida. Y el hecho es rigurosamente, el mismo. Nos dio el profesor Rojas una definición magnífica: "La felicidad consiste en tener buena salud y mala memoria".
    Si olvidas los cuernos, es como si nunca hubieran existido, no? Si extrapolamos esto a cualquier suceso doloroso de la vida, ya tenemos la receta de la vida feliz.
    Cómo me enrollo, no?

    ResponderEliminar
  5. Sara a mi me ha gustado tu rollo.
    La vida en pareja no deja de ser un contrato, con unos principios admitidos por los dos, y con unos limites que uno se compromete a no pasar...y de acuerdo con esos principios y esos limites, lo que para unos sera imperdonable, para otro sera un simple desvio del camino...
    Yo creo que si supone una perdida definitiva de la confianza que tenias, y pasa como con una porcelana que se rompe...la repararas, pero no dejara de ser algo reparado.
    Claro que habria que analizar como se ha llegado a eso...y la parte de responsabilidad de cada uno, pero para mi cuando la confianza se rompe...por mucho que uno quiera olvidar, perdonar...hacer como si...yo creo que no seria posible que todo volviera como antes.

    ResponderEliminar
  6. Yo soy fiel a mi misma.

    Tessa

    ResponderEliminar
  7. En la encuentas no está el apartado "Depende"

    Hipócritas!!! eso es lo que somos todos....

    Tessa....

    ResponderEliminar
  8. Ah! tema interesante....

    Para ser fiel a uno mismo a veces es necesaria la infidelidad....no os parece??

    Petons!

    ResponderEliminar

Puedes usar este ventanuco para escribir tu comentario