Egipto lleva ya varios días en situación prerrevolucionaria. Hasta ahora el ejército no ha intervenido contra la multitud, pero ya se han producido enfrentamientos entre manifestantes de uno y otro bando, desabastecimiento, saqueos, y algún intento de ocupar el Museo de El Cairo, donde se hallan innumerables obras de valor incalculable.
De nuevo asistimos al acelerado ritmo de otro acontecimiento histórico. Sus consecuencias pueden ser tan relevantes –incluso mucho más- que la desintegración de la URSS. Ahora no se trata del desmoronamiento del comunismo real, sino, quizá, de la extensión del islamismo teocrático. Egipto podría convertirse en un nuevo Irán.
Moubarak es un sátrapa. Pero Moubarak ha formado parte de la Internacional Socialista hasta hace una semana. Moubarak es un dictador, pero ha venido siendo un importante aliado de EE.UU. y un vecino cómodo de Israel. Ahora Occidente dice que Moubarak es un impresentable, pero Moubarak es uno de los socios principales de ese engendro llamado Alianza de Civilizaciones. Moubarak es un tirano, pero ha garantizado el transporte por el Canal de Suez y ha contribuido a la estabilidad de una zona de altísimo valor estratégico en la que se extrae la mayor parte del petróleo que da vida a las sociedades occidentales. Las sociedades occidentales ahora se indignan contra el funesto Moubarak, aunque no han dicho ni pío de él durante 30 años.
¿Cuál es la alternativa a los Moubaraks del mundo? ¿la barbarie de las turbas descontroladas o el orden divino que manda el Corán?
La Historia nos enseña que las turbas sirven para derribar reyes y gobiernos, pero son incapaces de gobernar una nación. Ocurrió en la Revolución Francesa, y ha ocurrido siempre. Alguien vendrá a sentarse en el palacio de Moubarak, y las turbas aceptarán un nuevo culo en el viejo trono, y se marcharán a sus casas a lamerse las heridas. Sería estupendo que a Moubarak le sucediera un sistema genuinamente democrático. Pero no me parece posible. Sería el primer país musulmán en el que tal cosa ocurre. Ojalá que dentro de cinco años no echemos de menos a Moubarak.
Para mi que se ha llegado a una situacion de no retorno, el problema es que "van, pero no saben donde van"
ResponderEliminarSiempre que se produce una situacion como la que se vio en Tunez, ahora en Egipto...Yemen, no es solo una causa, es un conjunto de causas, que llegado un momento se van de las manos.
Si se junta que es un pais con unos 80 millones de habitantes, que ademas crecen que da gusto...un pais sin politica economica ni social (importan casi la mitad de lo que consumen, y socialmente, viven la familia padres hijos nueras, nietos...sumisos y obedientes), que ademas tienen la mitad de la poblacion pasando hambre, pero tienen internet, tienen television, y tienen turismo...pues tienes un pueblo descontento con el estomago vacio, echando la culpa de los males a quien pueden echarsela...sin hambre, con trabajo...lo mismo Moubarak seguia siendo un lider "Moderado", que no hay que olvidar ha sido capaz de hacer grandes cosas, y que sirve de mediador entre muchos paises.
Es imposible predecir lo que pasara, de momento ayer se veian imagenes del museo del Cairo, con una sala en llamas, y de verdad que a uno se le revolvian las tripas...
"Aznar supedita la democracia en Egipto al interés de Occidente "
ResponderEliminarSe impone la democracia? Desde fuera...segun nos convenga?
Que miedo me da este hombrecico....
EEUU, parece ser que negocia la salida de Moubarak con el vicepresidente.
Siria y Jordania, se suman a las manifestaciones. A los jordanos los cambios no les han convencido demasiado.
No veo yo una solucion a corto plazo...