Zigor Goikoetxea es un preso de ETA. Uno de tantos.
Pero el pobre tiene un problema y necesita que lo vea el podólogo. No el podólogo de la prisión, ni tampoco el del ambulatorio más cercano, ni siquiera uno particular de la calle de al lado. No. El hombre necesita que lo vea precisamente un podólogo francés.
Y, claro, como parece ser que el podólogo francés no tiene tiempo de venir a una cárcel en España, la Audiencia Nacional ha decidido autorizarle a salir de la cárcel, y de España, para que pueda ir a ver al dichoso podólogo.
Ante cosas como esta… uno no sabe si partirse de risa o echarse a llorar.
¿Y qué tiene de especial ese podólogo francés?
ResponderEliminarJe ne sais pas
ResponderEliminarPeut-être qu'il est hors d'Espagne?
De tanto bajarse los pantalones, a este gobierno se le va a quedar el culo frío.
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