El concejal Pedro Zerolo ha oficiado una ceremonia en el ayuntamiento de Madrid, a la que ha denominado “bautizo civil”. En ese acto leyó la Convención Internacional de Derechos del niño; y declaró a éste “ciudadano de Madrid”.
Yo no tengo nada contra Pedro Zerolo, ni contra Cayetana Guillén Cuervo, ni contra el niño. Tampoco tengo nada que objetar a que cada cual haga las fiestas que quiera. Aunque eso sí: pagándolas de su bolsillo, y de acuerdo con las leyes.
Por lo tanto, tengo que estar en desacuerdo con esa ceremonia. Primero porque no existe reconocimiento legal alguno de “bautismos civiles”. Tal cosa no existe en la legislación española.
Segundo porque tampoco existe nada que sea la “ciudadanía de Madrid”. La ciudadanía es un derecho que se obtiene por nacimiento, ascendencia, o disposición administrativa, que en ningún caso depende de los ayuntamientos. Además, en España sólo existe la ciudadanía española, no de Madrid. Los residentes en Madrid son eso: residentes, o vecinos de Madrid.
Y tercero porque el uso de salones del ayuntamiento para celebraciones privadas supone un uso indebido de esos bienes.
Si el señor Zerolo (que no el concejal Zerolo), o los padres del niño, quieren organizar una fiesta para dar la bienvenida civil a la criatura pueden alquilar un salón en un restaurante, en una discoteca, o en un camping.
Por supuesto, tanto unos como otros pueden ser laicos, anticlericales o lo que les venga en gana. Lo que no pueden hacer es inventarse actos oficiales, ni utilizar el ayuntamiento para cosas diferentes de las previstas en las leyes. El bautismo no es obligatorio. Y para hacer constar oficialmente el nacimiento de un niño existe el Registro Civil.
Totalmente de acuerdo. Quien quiera fiestas que se las pague, desde el principio hasta el final.
ResponderEliminarAcabo de mirar, y se han celebrado en muchos otros ayuntamientos, incluso antes que el de Zerolo. Con lo cual, sigo pensando que el que quiera fiestas se las pague...pero no en el titulo del panel.
ResponderEliminarSinceramente, me parece una"pollada"....pobre bebé.... y quién lo patrocina, en el caso de Zerolo??..Experanza Aguirre y Gallardón??...Tessa..(Si Pilar, se extiende por toda España)....
ResponderEliminarTenéis razón. Zerolo no ha sido el único. Quizá el más llamativo, por la importancia de la ciudad, y la popularidad de la madre del niño.
ResponderEliminarPero sea el que sea el color del concejal o del ayuntamiento, me parece que no se les paga para eso.
Estarán aburridos y les sobrará la pasta para poner en marcha semejante gilipollez. Y sí, pobre bebe...el del "bautizo civil" y los bebes de los restos de bautizos a los que normalmente despiertan de un plácido sueño con una "jarra de agua fría".
ResponderEliminarEn fín Serafín...si San Dustan levantara la cabeza estoy segura que se subía a mi parra y se liaba a uvazos con unos cuantos....
Lo más sorprendente es q siempre hay una estupidez más gorda q la anterior, cuando yo ya pensaba q no era posible.:S
ResponderEliminarLo de "Bautizo civil" no es más que el nombre que le han puesto machaconamente los medios para, precisamente generar algo de lo que hablar. Por lo que he podido averiguar el nombre completo y real de la cosa no es otro que el de "Ceremonia civil de imposición de nombre", y ciertamente no me parece mal, desde un punto de vista antropológico.
ResponderEliminarMe parece un error contraponerlo al bautismo puesto que la verdad es que tienen unas implicaciones muy distintas.
Decía que desde el punto de vista antropológico tiene su miga, y es que el ser humano es el único bicho capaz de celebrar cosas: desde eventos calzoncilleros derribando alguna cabina telefónica, hasta elecciones europeas dando un saltito en un balcón, pasando por cumpleaños, bodas, nacimientos...
La celebración y la conmemoración son atributos específicamente humanos, y específicamente sociales. Una celebración en solitario no tiene demasiado sentido.
Celebrar el nacimiento de un hijo, me parece lógico. Tradicionalmente esa celebración ha sido dentro de un rito católico, llamado bautismo, lo cual dificulta, y mucho, a las parejas que quieran realizar una celebración fuera de ese rito tan marcado e imbuido en nuestra cultura. Ofrecer una alternativa que otorgue, no sólo un significado, sino también un significante a esa celebración me parece bien, y qué mejor forma de hacerlo que en el momento de inscribir a un hijo en el registro civil.
Luego nos quejamos de que para el Estado sólo somos un número, el del DNI, pues por lo menos, démosle un contenido a eso. Y si el contenido está relacionado con unos valores democráticos ¿qué problema hay?
El problema es, como decía al principio, y en eso coincido con vuestras opiniones, cuando esto se contrapone a la celebración religiosa, o se ve como una sustitución. Igualmente veo inútil otra moda que no hace mucho está en auge que son las comuniones civiles. En éste caso sí que lo veo como algo totalmente prescindible y sinsentido, pues no es justificable "civilmente" desde ningún punto de vista.
Si las inscripciones en el registro, y las bodas por lo civil llegasen al nivel estético conseguido por los señores de negro con espantaputas en el cuello, creo que otro gallo cantaría.
Al margen de esto, y volviendo al tema, me parece perfectamente lícito que cada cual celebre el nacimiento de un nuevo ciudadano como buenamente quiera, y si es en sociedad, y en acto público, como es el caso, mejor que mejor.
En este punto, en el post se comenta el uso de salones del ayuntamiento para actos privados. Creo que es justo aclarar que se da exactamente el mismísimo uso que las bodas civiles celebradas en ayuntamientos, de las que hay cada día en cualquier ciudad de España. La fiesta propiamente dicha, fuera, aparte, y pagado por cada uno... obviamente.
Saludos
Joer sevillano, ahora tengo que volver a pensar en esto, con lo segura que yo estaba de que me parecía una gilipollez...
ResponderEliminarPero tu no estás en el trabajo? pues déjate de discursos antropológicos y trabaja...
jejejejejejeje lo del espantaputas es genial....
ResponderEliminares que dabais asquito todos tan de acuerdito.... ;P
ResponderEliminarPues cuando inscribes en el registro civil, y en el libro de familia... todos podemos celebrarlo... recuerdo que con mis niñas, para sentirme supermegaprogre...jaja nos tomamos algunas botellas de cava... que por cierto eran del Penedés Catalán...pero ni se me ocurrió que para no bautizarlas, tenía que hacer lo mas parecido a un bautizo... no te joe...Sevillano... entiendo lo que dices...pero sólo antropologicamente hablando...lo sepas!!..que estoy de acuerdo con lo de que el ser humano es un bixo que celebra cualquier cosa eh?.... jaja (Abril, le puedo llamar asi?....no dejes que te confunda...mi niña... que ya viste lo que pasó cuando te regaló el río... )....
ResponderEliminarSpain is diferent... Tessa
Pues en esto tampoco estamos de acuerdo, Manu.
ResponderEliminar"lo cual dificulta, y mucho, a las parejas que quieran realizar una celebración fuera de ese rito tan marcado".
No veo dónde está la dificultad. Uno se va a un restarurante y organiza la fiesta que le apetezca.
"y qué mejor forma de hacerlo que en el momento de inscribir a un hijo en el registro civil=.
Pues encillamente es que no se trata de eso. el niño tenía ya tres años, y la inscripción en el Registro Civil hay que hacerla en el plazo de una semana desde el nacimiento.
"Y si el contenido está relacionado con unos valores democráticos ¿qué problema hay?".
No habría ningún problema si el Parlamento aprueba una modificación en el Código Civil para crear ese "bautismo civil", "cerermonia de acogida" o como lo quieran llamar. Pero de momento, es que NO existe tal cosa. Por lo tanto, cualquier simulacro de algo que no tiene existencia jurídica es un frauede, especialmente si se usan bienes públicos.
"me parece perfectamente lícito que cada cual celebre el nacimiento de un nuevo ciudadano como buenamente quiera".
Claro. Pero en su casa y con su dinero.
Si admitimos tu razonamiento ¿por qué no voy yo a tener derecho a celebrar en el ayuntamiento que a mi hijo le han salido los dientes? ¿o que me he comprado una moto? ¿Y por qué no puede celebrar Abril en el ayuntamiento que en su parra han salido brotes verdes?
Me sigue pareciendo una gilipollez...(con rios me dejo confundir...sí, pero con teorías antropológicas nononono).
ResponderEliminarHas visto que frondosa y hermosa está mi parra Boti...¿en el ayuntamiento? no pienso celebrar lo de mi parra en ningún ayuntamiento, me voy a ir a las islas a pegarme una fiestecilla con Tessa y si se quieren venir Sara, Arama y Pilar pues que se vengan y la liamos bien liadita...Uishhhh nos podríamos llevar también al trompetista ese que conoce Tetrabrick!!! ah no...que falleció, no me acordaba....